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"De todo lo escrito yo amo sólo aquello que alguien escribe con su sangre. Escribe tú con sangre: y te darás cuenta de que la sangre es espíritu. No es cosa fácil el comprender la sangre ajena: yo odio a los ociosos que leen." Nietzsche

"No hay Poeta por mediocre que sea, que no haya escrito el mejor verso de la literatura, pero también los más desdichados" Jorge Luis Borges

"La Nada está hecha exactamente de la suma de vidas por venir que no serán nuestras" Albert Camus


14/6/19

Noche 527

Léase escuchando Autumn Leaves de Miles Davis


Esa noche todo fue noche
                los círculos de piedra de tus ojos
                      las manos lisas
el cuerpo de fuego 
      las cenizas
                  las sábanas de incienso. 

Esa noche todo fue luna
                                      lejana
pálida 
             relámpago serpiente.

Esa noche todo fue soledad
                                    soledad de trígonos
de oscuras claridades
                        de ansiedad de las almohadas

Esa noche circular 
                           de tus caderas
                                          de tus ojos cerrados en la niebla
de tu sexo abierto y húmedo
                                      piedra caliente
cráter del cielo
                     entonces
la sangre corría
                       y como un lobo bebí  tu sangre caliente
bebí a cántaros sediento 
el río de tu cuerpo 
                           ¿ a dónde van las aguas de los sexos?
¿el aire que comimos casi hambrientos?
¿la estrecha penumbra de los cuerpos?

Esa noche todo fue silencio
silencio de las calles
de tus ojos somnolientos
y el adiós que sin palabras
se sumerge en mis recuerdos.   






Erotic Artwork Ivan Alifan Studio 






2 comentarios:

  1. Recuento de una noche en la habitación 103.
    Eran pocas horas las que me quedaban en la ciudad, te llamé, quería verte y necesitaba un abrazo de un amigo. Sucedió algo fascinante, aunque no nos habíamos visto en mucho tiempo al encontrarnos fue como si solo hubiese pasado un día sin vernos. Yo estaba desecha, con el maquillaje corrido, con todos los cabellos fuera de sitio y sin zapatos, tú no lo notaste o amablemente decidiste mirar a otro lado. Nos atiborramos de dulce, hablamos de libros, de porque no nos raptaban los extraterrestres, lo absurdo que es el infinito, lo cambiante de la moral. Por instantes tus ojos se cerraban, estabas agotado, aún así luchabas contra el peso de tus párpados para no perderte mis gestos. Finalmente quedamos en el punto de siempre, en el que te digo que me gustas pero que nada puede suceder, el momento en que sonríes y callas, no se si lo haces porque tengo razón o simplemente porque soy una ilusa que cree que sientes como yo y por respeto (o por miedo) no me llevas la contraria; no lo sé, todavía no me decido que significa tu silencio, creo que hay cosas que es mejor ignorar siempre, la realidad no es amiga de la magia. Para concluir nos despedimos con un beso, suave, sencillo, dulce, con un poco de sabor a helado Thai de chocolate. No nos volvimos a ver. Cada vez los kilómetros se hacen mas largos, tu vida ajetreada no deja tiempo para que recuerdes mi breve paso por tu vida ni mi amistad empalagosa; por otro lado yo sigo en lo mio, jugando con los colores, aprendiendo francés y comiendo chocolate amargo cada tarde y en ocasiones, hago una pausa para recordar lo que callamos y lo que dijimos esa noche en la habitación 103.

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