Poema de enero

¿Qué puede decirse de lo leve?
transparencia de árbol
                                  luna que no llega
              todos pasamos como sombras
¿pero hay algo que permanezca en la acera de estatuas somnolientas?
hay un águila derretida en las manos del tiempo
                                                       
                               hay un sueño incrustado en las esquinas de las horas
hay un reflejo de mis pasos en otra calle irreal
¿ qué es lo real sino la niebla?
y por las cosas que corremos cada día son
solo humo
                          son cenizas del Ganges
somos cenizas de muerto
                            un jardín lleno de tiempo
de árboles desiertos
 el amor,
                 las guerras
el olvido
la historia
 ¡todo ficción!
¿ qué queda después de hacer el amor
                              de lavar los platos
de reírnos de los otros
que queda después de caer y levantarse
                    y de seguir cayendo?
de engañarnos y engañar a otros
 qué queda después del olvido
                            qué queda en la memoria
esa que perdió mi padre,
que queda más allá o más acá
luego de estar llenos
luego de tenerlo todo
de conocer los rincones y las sastrerías
de conocer los bares y los prostíbulos
luego de visitar las bibliotecas y leer los clásicos
que queda después de nuestra muerte
de un beso que nunca dimos,
qué queda después del poema
del silencio
de unas llaves olvidadas en una puerta?
que queda del otro lado de  la soledad
             de las avenidas vacías
qué queda luego de vernos reflejados
y sabernos finitos
vacíos
efímeros
             ¿  hay algo que permanezca en la acera de estatuas somnolientas? .       


       

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"porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra" Cien Años de Soledad Soledad de los espejos, de marcados argumentos y pretextos vacíos. Soledad de trígonos inciertos, de amuletos muertos. Soledad de poemas inertes, soledad de paredes silenciosas, de piedras que naufragan en el sueño. soledad de cigarros y lamentos. Soledad de jazz y lluvia. Todo lo llenas, las avenidas y los semáforos, los besos y las oficinas. Todos estamos solos. En los partidos de fútbol y las fiestas, en el sexo y en el sueño, porque el amor y las putas, son solo los paliativos de la soledad.

Una publicación compartida de Juan Guillermo Buitrago (@jgbuitrago) el 22 Dic, 2019 a las 10:23 PST