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"De todo lo escrito yo amo sólo aquello que alguien escribe con su sangre. Escribe tú con sangre: y te darás cuenta de que la sangre es espíritu. No es cosa fácil el comprender la sangre ajena: yo odio a los ociosos que leen." Nietzsche

"No hay Poeta por mediocre que sea, que no haya escrito el mejor verso de la literatura, pero también los más desdichados" Jorge Luis Borges

"La Nada está hecha exactamente de la suma de vidas por venir que no serán nuestras" Albert Camus


29/5/19

Un viaje a Bogotá

En algún lugar de la candelaria.






























Fue en el último piso de la biblioteca Luis Ángel Arango donde encontraría la respuesta. Nos dirigimos sin pensarlo a la sección de arte y humanidades donde había un libro en uno de los mostradores; contenía todas las ilustraciones del budismo tibetano, lo ojeamos por un largo rato. Nos detuvimos en la última página donde se encontraba ilustrado el ciclo de la vida-muerte, una rueda gigante que simbolizaba el nacimiento, la muerte y reconexión, compuesta por todos los estados mentales posibles en un ser humano y cuya representación es alguno de los infiernos o paraísos posibles para esta filosofía. En el centro de la rueda del samsara había un gallo, un puerco y una serpiente que simbolizaban la avaricia, el deseo y la ira respectivamente, siendo los venenos de la mente y las principales causas del sufrimiento humano. Aquello que hacía girar este círculo era la ignorancia. El demonio que lo sostiene , se le denomina Mara , y representa la naturaleza ilusoria y efímera de la realidad.

El texto que acompañaba la imagen decía que estábamos condenados a esta absurda repetición, pero aún hay esperanza, ya que ni los animales ni los espíritus tienen la oportunidad que un humano tendría para romper esta condena circular. Habría que seguir caminando,  sea cual fuera el camino, la salida podría existir fuera de la caverna de los sueños y las sombras.

Como si la sincronicidad mística me siguiera, días atrás venía pensando en lo absurdo de este ciclo circular. ¿ Acaso la salida era tan simple como cruzar una habitación llena de espejos ? ¿como abrir la puerta o tirar la cuerda del retrete ?¿ como abrir un libro y olerlo, como flotar tiernamente en  el vacío de un sueño amorfo, lleno de peces o de agua especular? ¿ como cruzar la arena de un desierto azul ?¿ como salir volando de este cuerpo y este culo grosero? ¿ podría ser tan fácil no-pensar e ir por las calles sonriendo, sabiendo que jamás volveremos a esta tierra indolente, a este mundo de plástico, a este jardín mutilado, de escombros y de tiempo?.

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